Para realizar la clasificación existen dos enfoques:
-Clásico: que analiza las características (morfología y estructura) diferentes.
La unidad de la taxonomía es la cepa (células genéticamente iguales). Las cepas con características iguales forman una especie y las especies relacionadas forman un género.
- Genético: utiliza la relación genética entre diversos organismos. Busca que el ADN sea semejante o igual.
Para la nomenclatura, existen formas diferentes, dependiendo de si se trata de bacterias, hongos o virus.
Bacterias:
Su nombre está constituido por dos palabras. La primera en latín que indica el género y la segunda nos indica la especie. En algunos textos sobre cómo nombrar bacterias a la hora de escribir un texto científico, hacen la advertencia de que como normalmente se abrevia el genero puede haber confusión. Por ejemplo:
M.Bovis, podría referirse a Moraxella Bovis o Mycoplasma Bovis
Hongos:
Su nomenclatura se realiza en función de sus rasgos morfológicos. Se analiza la morfología de las hifas, septos, ramificaciones, esporas y colonias.
Virus:
Un primera aproximación hace referencia a quién atacan, así que tenemos los animales, las plantas y los bacterias.
Existen muchas nomenclaturas para los virus, por ejemplo la de Baltimore, morfológica, la clasificación de Holmes, y ICTV (Comité Internacional de Taxonomía de Virus).
Para la nomenclatura de los virus, se miran las características primarias, que son la cápsida, el ácido nucleico y la transcriptasa. Y las características secundarias, que son el huésped, la transmisión y las características inmunológicas.
Referencias:
Comentarios
Publicar un comentario