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Ignorancia versus actitud

No saber nos vuelve desconfiados, no entender, es posible que nos haga percibir lo que se nos presenta como negativo. ¿Qué ocurre con la ciencia? ¿El conocimiento implica tener una actitud positiva o una actitud negativa es la que deriva en ignorancia?
    Creo que ambas son secuencias lógicas pero con algunos matices. No hay una implicación de sí y solo sí entre ellas. Se pueden dar unas cuantas casuísticas diferentes. ¿Podemos decidir qué fue antes: la actitud o el conocimiento?
    Planteado bajo esta dicotomía, es importante distinguir que no se trata de una versión de ida y vuelta. En algunos casos, una buena alfabetización científica puede derivar en una percepción negativa y, del mismo modo, una carencia de cultura no tiene por qué implicar una percepción negativa.
    Lo primero que quiero destacar es que conocimiento y actitud positiva pueden percibirse como consecuencia lógica. Sin embargo, en muchos casos, el conocimiento es, precisamente, lo que motiva la desconfianza. No es extraño encontrarse con personas con un buen nivel de cultura científica, incluso con formación científica, que conciben la ciencia como algo preparado para engañar, para someter y para obtener beneficio. No es raro que en los grupos más radicales de negacionistas haya profesionales con conocimientos científicos muy amplios. Creo que se trata de un grupo reducido de personas las que están en esta posición, pero en cualquier caso, invalida nuestra premisa inicial.
Man thinking of science 
Creación propia con Dall·2

    Por otro lado, achacamos la carencia de conocimiento a la percepción negativa de la ciencia. La falta de cultura, el analfabetismo, pueden crear desconfianza y, por extensión, incredulidad ante lo que la ciencia presenta. En muchos casos se trata de una falta de comprensión, de percepción, de distancia y de falta de interés motivado por el desconocimiento.

    Nuestra sociedad es compleja y distinta a las sociedades pasadas, se ha perdido un poco de la magia de la ciencia y, a pesar del esfuerzo continuo por acercarla a la sociedad, no tiene mejor valoración que hace unos años. La complejidad de las relaciones entre ciencia y sociedad hace que se intente abordar su acercamiento de multiples maneras.

    El problema de la percepción suele aparecer en el momento en que se intentan crear puntos de encuentro. Por un lado la parte implicada en la difusión del mensaje tiene que tener cuidado con el lenguaje que estructura y con el canal que usa. Es habitual que cualquiera que ya tuviera un interés previo y tuviera una percepción positiva se sume a la iniciativa. En general, se tratará de personas con una cultura científica amplia y que están dispuestas a ampliar su comprensión. 

    Por otro lado, tenemos a una sociedad inmersa en el culto a lo rápido y con un interés superficial por lo que la ciencia implica y explica. De hecho, muchas de las actividades que se desarrollan para llevar la ciencia a la ciudadanía exigen grandes alardes de sorpresa para que resulten atractivas.

   ¿Qué ha pasado con esa percepción de la ciencia? La sociedad ha cambiado y no diré que a peor, simplemente es distinta. Todo es rápido, hay mucha información y poco tiempo para leer todo lo que se publica. Los mensajes cortos y contundentes triunfan. El acceso a la tecnología hace que muchas cosas hayan perdido su misterio y su magia. La ciencia se ha abierto a todo y a todos, eso hace que lo que antes nos podía interesar por no estar al alcance de cualquiera, ahora nos aburre porque podemos encontrarlo en cualquier lado. Vivimos en la cultura de lo rápido, lo viral, las y los influencers y apenas tenemos tiempo para asimilar tanta información. 

    Tener cultura científica puede ayudar a entender mejor cómo funciona la ciencia y cómo se aplica en la vida cotidiana, lo que puede llevar a una percepción más positiva. Esta cultura comprende conocimientos sobre cómo se realizan investigaciones científicas, cómo se interpretan los resultados y cómo se aplican en la práctica. También incluye una comprensión de los métodos y principios científicos así como de la historia y la evolución de la ciencia.

    Sin embargo es importante tener en cuenta que la ciencia no es siempre positiva en el sentido de que siempre trae beneficios o soluciones a los problemas. Algunos descubrimientos científicos pueden tener consecuencias negativas o impredecibles, y es importante tener en cuenta estos aspectos al considerar el impacto de la ciencia en la sociedad. Sin embargo, en general, la ciencia puede ser una fuerza positiva al proporcionar información y herramientas para comprender y mejorar el mundo en el que vivimos.

    Por otra parte, la incultura científica puede llevar a una percepción negativa de la ciencia de varias maneras. En primer lugar, la falta de conocimientos científicos puede llevar a la difusión de información incorrecta o engañosa sobre la ciencia, lo que puede crear miedo o desconfianza. También puede dificultar la comprensión de los avances científicos y su impacto en la vida cotidiana, puede generar una percepción negativa de la ciencia como algo irrelevante o desconectado de la realidad.

    Además, la incultura científica puede ser un obstáculo para tomar decisiones informadas sobre temas científicos importantes. Por ejemplo, cómo enfrentar el cambio climático o cómo utilizar de manera responsable la tecnología. Esto puede llevar a la adopción de políticas o acciones que no están basadas en la evidencia científica y pueden tener consecuencias negativas.

    Sin embargo, que haya relación entre la cultura científica y la percepción positiva no implica que haya causalidad. Creo que todos tenemos en nuestro entorno gente formada en ciencia con creencias ridículas y que creen que la ciencia tiene como objetivo el engaño. Al mismo tiempo podemos encontrar a personas con escasos conocimientos científicos y que, por el contrario, valoran la ciencia y sus avances como un gran logro de la humanidad. 

 

 


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