Ir al contenido principal

¿Por qué no estás gordo para un selenita?

Cuando en noviembre de 2021 empecé el Máster de Cultura Científica se lo conté a mi cuadrilla. Ni qué decir tiene que son absolutos fans de mis majaderías y son capaces de recorrer 200 kilómetros para verme dar mi primera charla y, de momento, la última. Sin embargo son bastante peculiares, bueno, somos y, de vez en cuando, aparecen con preguntas curiosas. 
    En un alarde de fantasía, uno de ellos me preguntó: “si muere el universo ¿quién hereda?” La respuesta la podéis encontrar aquí y, otro de ellos, directamente me dijo: “yo quiero saber por qué no estoy gordo para un selenita”. Sí, es innegable que son originales pero me ponen en algún que otro apuro. Le di una vuelta a su pregunta y lo que me salió fue lo siguiente.
    Existen tres posturas, la realista, la de “ciencia de barra de taberna” y la que intenta explicar la pregunta desde la “ciencia de la buena”. 
    La primera es sencilla, no se han encontrado selenitas así que ni gordo ni flaco.
    Desde la “ciencia de barra de taberna” la respuesta explicaría que, si hicieran un pequeño cálculo, suponiendo que no estás en la Luna y que no pueden verte, pensarían que estás extremadamente delgado.  Sí, así es.

Selenitas riéndose de los humanos. 

    En la Tierra se suele medir la gordura o ausencia de ella usando el IMC (índice de masa corporal). Consiste en medir la relación que existe entre el peso y la altura. Así que, como en la Luna el peso es aproximadamente 1/6 del peso en la Tierra, tu índice de masa corporal se reduciría drásticamente. Vamos a suponer que los selenitas no se preocupan demasiado por su imagen, y seguro que por la tuya tampoco, por lo que han cogido para calcular el IMC el modelo terrestre.
    Hacen sus cálculos con el siguiente ejemplo: una persona que mide 1.75 metros y que dice que pesa 90 kilos. En este caso, en la Tierra, tiene un índice de masa corporal de 29.38. Para calcularlo hay que dividir el peso entre la altura (en metros) al cuadrado.
    En la Luna el peso es aproximadamente un 1/6 del que tenemos en la Tierra, por lo tanto el índice saldría 4.89. Si tenemos en cuenta que las tablas de IMC consideran normal tener un índice entre 18.5 y 24.9, un selenita pensaría que estás a punto de morir por delgadez extrema. Así que no supondría que estás gordo, de hecho en base al estándar estético selenita y al IMC terrestre, pensarían que eres de otra especie.
    Ahora bien, si hacen “ciencia de la buena”,  lo que creerían es que eres igual de gordo o de delgado. ¡Cuidado con los selenitas! que usando el modelo terrestre han cometido un error y la imagen que se han formado no es la correcta.
    Para el cálculo del IMC usamos el peso (fuerza), pero el peso no es la masa (cantidad de materia). ¿Y por qué usamos el peso? Sencillo todos estamos en la Tierra, así que el factor multiplicador va a ser el mismo para todos los habitantes. Tenemos nuestra masa (que es lo que determina si estamos gordos o no) multiplicada por 9.8 m/s² que es la gravedad terrestre. A esta multiplicación es a lo que llamamos peso, pero usamos mal la unidad de medida, que no son kilogramos (unidad de masa), sino newtons (que es una unidad de fuerza). 
    Si los selenitas quieren ser honestos y comparar de verdad si el IMC es mayor, menor o igual, tienen que comparar masas, no pesos (ya que éstos dependen de la gravedad). Si prescinden de la gravedad y calculan el IMC con tu masa, que en principio variará poco de la Tierra a la Luna, el resultado en ambos lugares será el mismo.
    Usando el mismo ejemplo, a lo que llamamos 90 kilos de peso, en realidad son 90 newtons (N), que es la fuerza que le hacemos a la báscula en la Tierra. Si los selenitas dividieran 90 N entre la gravedad terrestre, que es de media 9.8 m/s², obtendrían la masa de la persona. En este caso la masa sería de 9.18 kg. 
    Como tu masa y tu altura no cambiarían de la Tierra a la Luna, el IMC calculado con la masa dividida entre la altura al cuadrado, les daría el mismo resultado que te saldría en la Tierra si usaras también la masa: 3.08 de IMC. Evidentemente, las tablas tendrían que recalcularse si las compartiéramos con otros planetas o satélites. Imaginad que hubiera una colonia humana en Marte, la tabla se debería calcular en base a la masa, no al peso. 
    Lo que demuestra que estás igual de gordo o de delgado en la Tierra, en la Luna o en un anillo de Saturno. Por lo tanto, tendrías que recurrir a criterios estéticos de los selenitas y que sean ellos los que decidan si estás gordo o no.
    Por mi parte creo que dependerá de si a los selenitas le interesas como comida, en ese caso, me parece que no habrá gordura, habrá jugosidad. 

Imagen mental de mi amigo al comprender la diferencia entre masa y peso


    En cualquier caso, al siguiente que te diga que estás gordo, le puedes decir que no, que en realidad tu masa es pequeña y que los 90 kilos (que son newtons) son pura fuerza.😉

    Con esta entrada participo como #polivulgador de @hypatia sobre #PVmalentendidos.




    

 

Comentarios

  1. Pues un bonito texto divulgativo sobre los conceptos de masa y peso... y un poco de visibilidad para los selenitas ;-P

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Lo más visto

La guerra más allá de las bombas 🦠

Lo que más ha gustado

La guerra más allá de las bombas 🦠

No soy ninguna experta en microbiología. Mucho menos en inmunología. Sin embargo,  en esta entrada  os contaba cómo La Gran Armée de Napoleón se veía abocada al fracaso en su intento de conquistar Rusia debido a, entre otras cosas, enfermedades propias de las guerras. Un fracaso estrepitoso que al final se paga siempre con vidas humanas.      Ahora tenemos otra invasión en curso, la de Rusia a Ucrania. Los asuntos políticos o la estrategia militar no es algo que me interese demasiado, al fin y al cabo eso está en manos de unos pocos que no siempre son los más listos del lugar. Pero ¿qué pasa con la población y con los soldados?      Hasta hace un mes aproximadamente la conversación estaba centrada en el SARS-CoV-2. Ahora, de repente parece que nos ha dejado de preocupar. Las medidas de contención han decaído y tenemos la sensación de que ha pasado todo. Y casi tocamos con lo dedos la normalidad absoluta (bueno o algo parecido a lo que teníamos hac...

Cuestión de tamaño

Acababa de cometer un error, de los gordos, de esos que no dejan indiferente a nadie. Estaba preocupada y pensó que era el primer error en 20 años de grandes éxitos, pero era un error. Tenía que arreglarlo.     Se lo advirtieron cuando empezó a trabajar: «cuidado con los errores que cometes. En este campo cualquier modificación puede desembocar en un apocalipsis global»     20 años atrás había presentado su proyecto en el Instituto de Estudios de lo Inconcebible . Logró un gran éxito de crítica y público. Contaba con una trayectoria intachable de funcionamiento. Con el tiempo, gracias a las aportaciones de Sakura, el lugar pasó a llamarse   Instituto de Expansión y Contracción Espacial de Washasha .      Sakura en su laboratorio (Foto de archivo del año 2372)     Desde que acabó sus estudios en 2371, Sakura se había dedicado a diseñar un sistema para contraer o expandir cualquier cosa. En su época de estudiante se había dado cuenta ...

May the ´Darth´ side of the Science be with you.